Cuentan que hace 50 años y dos semanas que el Sevilla no jugaba un partido en la mas alta competición europea.

Cuentan que en aquella ocasión tuvimos un rival portugués que ya tenía un gran nombre en el concierto europeo, el Sporting de Lisboa.

Cuentan que aquello fue una ocasión que los que la vivieron no olvidaron jamás.

Y cada vez que me lo contaban yo pensaba que jamás lo podría vivir, que yo pudiese ver en mi estadio un acontecimiento de tamaña magnificencia no era mas que una quimera.

Pero mereció la pena esperar....

La noche del 2 de Octubre de 2.007 pasará a engrosar junto con la del 10 de Mayo de 2.006 la categoría de fechas inolvidables.

La noche era de perros, el euroabono carísimo, el rival sin enjundia, pero , era lo que yo había estado esperando desde que vi por primera vez un partido de Copa de Europa en la Televisión, siempre me imaginaba a mi equipo jugando ahí pero SIEMPRE SABÍA que ese cielo nunca lo tocaría yo.

Y de pronto, tras 5 años de ensayos, llegó el día de la verdad.

Nadie podía privarme de aquel momento.

Me acordé del día que vino a jugar el Kaisserlautern con aquel Andreas Bremhe en el lateral

en una noche similar y le ganamos 1 a cero con el debut de Juán Alvarez (penalty fallado incluido), me acordé de la noche del Torpedo de Moscú

con el Ramón Sánchez Pizjuán hecho un barrizal y con la sensación de desasosiego final.

Afortunadamente la cosa fue como todos planeamos y nuestro equipo salió a acallar bocas, a desterrar malos augurios, a matar o morir.

Cierto es que el Slavia es cortito atrás, pero nunca se cuando el rival es malo y cuando mi equipo es una MÁQUINA, tratándose del Sevilla se que no soy ecuánime, pero ayer era imposible que el equipo fallara, tantos años esperando .............

...... Y valió la pena.

Gracias Sevilla. Por hacerme realidad hasta los sueños que yo sabía que jamás se harían.

.- David Zahara -.

Un ruego para Monchi: Ramón, sigue al 21 del Slavia el tunecino, me pareció un futbolista enorme.